Hace unas semanas escuche una predica muy interesante que en estos dias he podido comprobarla con personas a quienes quiero mucho, quienes si bien dieron el paso de acercarse a Dios les ha sido complicado entender esta nueva vida espiritual. No los juzgo pues a mi tambien se me dificulta en algunos momentos de mi vida diaria entender que mi lucha es sobre todo espiritual. No es que no viva en el mundo, hablemos claro, cada día planifico mis estrategias a seguir, mis objetivos a cumplir y mis problemas a enfrentar, pero todo esto lo hago poniendo mi vida humildemente en manos de Dios.
Bueno la predica que les menciono giraba en torno a los elementos de un capuccino y como la ilglesia cristiana puede parecerse a esta bebida. Pues el capuccino que tanto nos gusta contiene espuma, leche y su infaltable shot de expresso. Segun el pastor, existen cristianos de los que acuden a su iglesia uno que otro domingo, no hacen de la palabra su camino de vida, pero se sienten en paz con Dios porque se consideran buenas personas, pues ellos serían la espuma, un elemento que no contribuye con ningun sabor al capuccino pero están ahí. No tiene cuerpo y simplemente es casi aire.
Tambien existen los cristianos que son como la leche, son aquellos que adaptan la palabra a su manera de pensar, y pobre de aquellos que los contradigan, pues son dueños de su verdad mas no de la palabra de Dios. Ellos son la leche porque amortiguan el sabor concentrado del cafe, ellos modifican ese sabor a sus intereses o pensamientos. Pero sera Dios quien los juzgue pues su pecado es mas grave de aquellos que no conocen la palabra del padre.
Y finalmente tenemos a aquellos que son el sabor exquisito del cafe concentrado. Cristianos que hacen de su vida diaria un ejemplo de humildad ante Dios, no solo acuden a su iglesia para las alabanzas sino tambien para crecer en la palabra. Ellos serian el shot de expesso, la esencia misma de la iglesia.
Pero entonces yo me pregunto que hacemos con aquellos que no han comprendido el mensaje espiritual de Dios, acaso juzgarlos es el camino? Para nada, todo lo contrario. A mi humilde entender considero que uno debe ser testimonio vivo de un camino en Dios, sincero seguidor de la palabra y humilde en sus decisiones. Intentar siempre ser justo, pues no existe hombre justo pero si justificado. Uno debe orar por aquellos que no comprenden aún esta vida espiritual, sin presiones de ningun tipo, sin tratar de convencer a nadie, pues es más dificil hacer entender a alguien que esta equivocado que enseñarles algo nuevo.
Si, debo confesar que vivo rodeado de algo de espuma y leche, pero espero humildemente desde el fondo de mi alma que estas pequeñas gotas de expresso los ayude a buscar en la esencia espiritual que tienen el verdadero proposito de Dios con ellos.
Bueno la predica que les menciono giraba en torno a los elementos de un capuccino y como la ilglesia cristiana puede parecerse a esta bebida. Pues el capuccino que tanto nos gusta contiene espuma, leche y su infaltable shot de expresso. Segun el pastor, existen cristianos de los que acuden a su iglesia uno que otro domingo, no hacen de la palabra su camino de vida, pero se sienten en paz con Dios porque se consideran buenas personas, pues ellos serían la espuma, un elemento que no contribuye con ningun sabor al capuccino pero están ahí. No tiene cuerpo y simplemente es casi aire.
Tambien existen los cristianos que son como la leche, son aquellos que adaptan la palabra a su manera de pensar, y pobre de aquellos que los contradigan, pues son dueños de su verdad mas no de la palabra de Dios. Ellos son la leche porque amortiguan el sabor concentrado del cafe, ellos modifican ese sabor a sus intereses o pensamientos. Pero sera Dios quien los juzgue pues su pecado es mas grave de aquellos que no conocen la palabra del padre.
Y finalmente tenemos a aquellos que son el sabor exquisito del cafe concentrado. Cristianos que hacen de su vida diaria un ejemplo de humildad ante Dios, no solo acuden a su iglesia para las alabanzas sino tambien para crecer en la palabra. Ellos serian el shot de expesso, la esencia misma de la iglesia.
Pero entonces yo me pregunto que hacemos con aquellos que no han comprendido el mensaje espiritual de Dios, acaso juzgarlos es el camino? Para nada, todo lo contrario. A mi humilde entender considero que uno debe ser testimonio vivo de un camino en Dios, sincero seguidor de la palabra y humilde en sus decisiones. Intentar siempre ser justo, pues no existe hombre justo pero si justificado. Uno debe orar por aquellos que no comprenden aún esta vida espiritual, sin presiones de ningun tipo, sin tratar de convencer a nadie, pues es más dificil hacer entender a alguien que esta equivocado que enseñarles algo nuevo.
Si, debo confesar que vivo rodeado de algo de espuma y leche, pero espero humildemente desde el fondo de mi alma que estas pequeñas gotas de expresso los ayude a buscar en la esencia espiritual que tienen el verdadero proposito de Dios con ellos.
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