jueves, 11 de junio de 2009

Paso a paso



Tengo un pastor que es mi guia y estamos cultivando una bonita amistad, el ultimo domingo acudi a mi iglesia pues un amigo mio necesitaba urgentemente de paz en su corazon, pero cosas del destino o mejor dicho temores naturales por lo desconocido le impidieron acudir a nuestra cita. Jairo, mi amigo pastor, tambien fue plantado por un hermano a quien apreciamos mucho porque seguro existieron cosas que le impidieron acudir, pero concluimos ambos que quizas Dios quizo que tengamos un encuentro personal.
Hablamos de muchas cosas, el me ve muy motivado y entusiasmado con el tema espiritual, pero como hombre muy cauto y experimentado en la palabra me guia complacientemente en mis dudas. El conoce muy bien mi situación espiritual, las cosas que me afligen y las dudas que se me presentan. Le contaba que en las ultimas semanas he tenido la suerte de encontrar el cariño de algunas amigas que veian en mi un cambio honesto, sin embargo tengo el temor de que vayan a confudirse con mis actos, o peor aun por un momento de debilidad mia yo tambien confunda mis sentimientos. Lo claro es que por ahora no estoy buscando compañera sentimental, aun tengo que crecer espiritualmente y dejar atras mis recuerdos que tengo frescos.
Jairo me regaló entonces un mensaje muy hermoso. Me preguntó si conocia las definiciones de amor y lujuria. Claro que me confundió con la pregunta, intente darle mi versión de amor que creo estuvo acertada pero de lujuria no sabia nada. Me parecia un termino muy prohibido o algo por el estilo. Pues bien, segun mi amigo pastor, la lujuria es cuando buscamos la satisfacción personal a sacrificio de otras personas, sin interesarnos del dolor que les podemos causar. Éntonces dió en el blanco en una. Me aclaró las cosas. No existiria algo tan egoista de mi parte como comenzar una relación por el simple de hecho de sentirme solo. No es justo para nadie. Es un acto de lujuria y no es de agrado de Dios.
Crecer espiritualmente lleva su tiempo y poco uno va comprendiendo cual es el camino correcto a la hora de tomar decisiones de nuestras vidas. No deseo que nadie sufra por mi, ni que se apiaden de mi soledad ni de mi intermitente nostalgia por lo perdido. Sólo deseo poder ser una persona sincera que brinde amistad incondicional. Quizas luego se podra dar el siguiente paso. Me parece extraño todo lo que pienso ahora pero me convence que es el camino correcto.

1 comentario:

  1. Me identifico mucho en las cosas que dices. Hace poco terminé una relación de noviazgo, que hasta planes de matrimonio tenía. Mi exnovio ya tiene una nueva pareja y dice que por fin ha conocido el amor y todo eso y yo estoy en un momento de mi vida en que creo que lo importante es aprender de mis errores para mejorar como ser humano, acercarme a Dios para entender a los demás y a mi misma. Y tengo muchas ganas de hacer nuevos y buenos amigos, que comprendan que lo que quiero no es tener una pareja para no estar sola (muchas veces los familiares y amigos cuando uno termina o cuando pasa por un mal momento amoroso creen que la solución está en presentarte "posibles candidatos" y no es así). Yo quiero este tiempo de reflexión conmigo, con la vida, con Dios y por supuesto espero tener la posibilidad de conocer buenos amigos que sepan que la amistad es el tesoro más grande que puede haber (laamistad basada en el respeto y la confianza). Saludos! melissa

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