sábado, 18 de abril de 2009

Descanso aliviado



JOB 11.13
Si tú dispusieres tu corazón, y extendieres a él tus manos;
Si alguna iniquidad hubiere en tu mano, y la echares de ti, y no consintieres que more en tu casa la injusticia,
Entonces levantarás tu rostro limpio de mancha, y serás fuerte, y nada temeras; Y olvidaras tu miseria, o te acordaras de ella como de aguas que pasaron.
La vida te será más clara que el mediodía; aunque oscureciere, será como la mañana. Tendrás confianza, porque hay esperanza; miraras alrededor, y dormirás seguro.
Te acostarás, y no habrá quien te espante; y muchos suplicarán tu favor.

Tomo cada día como viene, no ando muy afanado por el futuro, sin embargo son en las noches que mi subconciente saca a la luz recuerdos que he vivido hace poco y empieza la lucha espiritual sobre lo mal que he actuado y como he dañado el amor de los que me quieren. Entonces me siento y oro con mi Espiritu Santo, le ruego que me permita descansar, que todo lo he dejado en manos de Dios, y que si mi amor es la prueba de fe que Dios necesita, con el tiempo voy a demostrar que el amor lo puede todo. Pido por la salud de mis hijas y su mamá, por mi familia, por ella, por sus hijos y su familia. Por la esperanza de reconciliarme con todas esas personas que quiero y dejar todo atras. Y luego duermo profundamente. Ha sido el mejor remedio a mis maratones de televisión de madrugada. Descanso con la esperanza de que Dios lleva mis preocupaciones, y que todo tiene su tiempo. Orar no tiene nada de vergonzoso, mas bien te eleva y te acerca más con una fuerza maravillosa llamada Dios. Intentalo!

No hay comentarios:

Publicar un comentario